lunes, 30 de julio de 2012

Hasta el año que viene

Soy una antigua trabajadora de la empresa, por motivos ajenos a ella este año no he podido estar en el campamento, pero sigo sintiéndome parte de ese pequeño gran equipo.
Hace ya cinco veranos que Luis decidió confiar en la que por aquel entonces solo era una niña entusiasta, con muchas ganas y mucho que aprender.
En cuatro campamentos, con sus correspondientes horas previas de preparación y horas posteriores de recuerdo y anécdotas, he vivido tantas cosas que si empezara no sería capaz de terminar.
La primera vez que llegué al campamento cargada de maletas, esa ilusión que se respira en el ambiente y todas esas sonrisas expectantes, las batallas por conseguir meter a todo el mundo en la cama, los caminos interminables a la piscina y siempre alguien que parece que quiere quedarse por el camino, disfraces con bolsas de basura, talleres con mejor y peor resultado (y malo...), horas y horas de juegos en las que las carcajadas son siempre la banda sonora.
Y como no, alguna que otra noche sin dormir, guerras de estropajos, regalices, happy hour, hoy no me ducho, cortar cd's, cotilleos en la cocina y miradas que lo entienden todo.
He visto como l@s que llegaron pequeñit@s y tenían miedo a los juegos de noche, ahora se atreven a todo, como l@s que ya estaban crecidit@s fueron dejando sitio a nuevas generaciones y dejando también de paso un vacío en el corazón de algunas monitoras. Como l@s nuev@s de un año son l@s veteran@s del siguiente, gente que permanece y gente que poco a poco ha tenido que irse, aunque siempre formaran parte de esto que hemos construido.
Ese Señor que un día confió en mi, me empujó a volar año tras año, mas como un amigo que como el jefe, jefazo que es. L@s que empezaron siendo solo compañer@s acabaron siendo mucho mas, demostrándome que personas con las que creías no tener nada en común pueden convertirse en personas muy importantes, incluso a 2000km de casa.
He reído tanto, he aprendido tanto....

He intentado luchar contra la barrera del espacio para sentirme un poquito mas cerca esta semana e incluso he disfrutado sabiendo lo que está pasando allí y me da la misma pena saber que se termina como los años que lo he vivido.
No se que pasará de aquí a un año, ni si podré volver a forma parte de todo eso, pero les aseguro, que sus hij@s, herman@s, niet@s, amig@s...  Han pasado estos días en el mejor lugar y con las/los mejores.

Siempre
Yuyu

 "Cuando fuimos los mejores"

2 comentarios:

  1. Creo que no hace falta decir nada más. Una crónica preciosa para un final de campamento que nunca olvidaremos. Besos para todos. JULIETA.

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